Notenerlallavemeloimpide*

Ojalá pudiera tenderte una mano y sacar de ella un arcoiris de colores infinitos, para que en él cabalguen, desde tu pesado corazón, todas las imagenes horribles. Se transformarían, como lo hacen las alas caídas del fénix, dispuestas a renacer.
Ojalá pudiera tener pleno derecho para agarrarte los ojos, tapar el mundo, y hacerte ver, que tu luz se ve a kilómetros; que tu libertad se llama presente, no pasado; que alimentes tu risa, tu amor propio, tus habilidades, no tu dolor; que la vida es propósito y la oportunidad de aprovechar una experiencia dan sentido.
Ojalá pudiera, si me dejaras, si todo esto no fuera un sin.sentido, alejado de los principios y los tiempos, olvidandonos del precipicio y el yunque, que la mayoría de veces caminar con la inseguridad merece más la energía puestas toda en una que seguir viviendo así, con un lastre golpeando las costillas. Que eres imperfecto, animal humano, y eso da derecho a aprender de la experiencia y ser guiado por ella sin importar los kilómetros. Que aceptar las sensaciones por triste, vulnerable o confuso que resulte, ayuda a alimentar la luz.... Que merece la pena, siempre, siempre merece intentarlo.
Ojalá supiera, la luna me espía y lo sabe, encontrar el modo de colar en tu mirada la libertad de no ser nadie para los que no saben mirarte de maners limpia y si egoismos o rencor, para que econtraras la manera de libertarte entonces, de las expectativas de otros... Para empezar a hacer los cambios necesarios para seguir tu propio destino (sin importar entonces cuan lejos pudiera estar de mi).
Buf... Ojalá pudiera... Ojalá supiera ayudarte a dejar de castigarte, porque el perdón es un proceso de recordar lo que pasó, no de tolerar u olvidar. Es avanzar por tu salud y bienestar. Es querer cambiar el error, viviendo su ejemplo.

Eres un buen ser, y eso es difícil en esta vida dura. Eres luz, lo sé. Y tus desastres tambien sirven, tambien valen... Tambien gustan, enamoran...
Ojalá me dejaras pedirte, completo desconocido, ser que ya estás en mi, sin que eso me de derecho a decir... Ojalá pudiera, digo, pedirte, que tus faltas no detengan tu progreso. Que te des permiso para sanar. Que te des perdón.
Que nos des futuro.
Que ames la realidad que construyes empezando de cero.
Desde ti.

Pero no puedo... Yo no soy nadie. Absolutamente nadie, sin nada que decir.