Palpar las bocas, la bragueta, los anhelos.
Hallar el animal con férvidas ansias.
Buscar las maneras, las posturas, el clímax.
Y en limbos extraños hundir la locura.
Beber los fluidos como elexir de la vida.
Morder la herida como placer y domaje.
Y agarrar miradas con dulzura y unión.
Salvajes, hambrientos, de amargo dulzor.
Que en la cima se acuerdan armonías de dioses, y en las sábanas, la ducha, la silla o la mesa se resbalan las agua del amor.
La dicha se palpa, se lame y se besa.
Y una mano no es mejor que dos.
Debussy maestro.. Quiero sinfonías!
Melodías de lenguas, de roce y calor.
Despacio.
Mírame de cerca.
Detrás de tanto fuego quiero que haya (h)amor.*
1 comentario:
eso es tuyooo?? que bueno!
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