atenciónconsciente*

Con cada momento vivido, cada pieza de esta rueda que es el tiempo que vivimos, cada "aquí y ahora", es un paso en el saber de la danza que bailamos. El meternos en el verdadero tiempo, viviendo cada secuencia, es ir formando el paisaje de ese puzzle del día a día. Aún sin entender muy bien qué figura vamos armando... ir descubriendola conforme arrancamos. Sin miedos, siendo conscientes de que ninguna armadura es lo suficientemente fuerte para ocultarnos tras ella, así optando por la valentía que da el saber estar y el querer aprender de lo vivido... Caminando hacia el ascenso, o hacia el "carpe diem" proyectado, con una sonrisa en el rostro. Y si no, que las lágrimas nunca sean para nada... Y entendiendo que, aunque a veces las "piezas" dificulten el entendimiento, éstas nos ayudan a darnos cuenta que las otras han ido colocandose en su lugar, en la ubicación adecuada... Siendo perfectas y ajustadas al momento.

 Y a seguir caminando hasta el VIVIR...