Ahora acepto esto que escribí hace muchos meses atrás...
No estoy en condiciones de pedir nada, aunque me gustaría. Lo intenté por unos momentos... pero entendí rápidamente que no era ni el momento, entiendo la época en la que estamos, ni mucho menos el modo; las tecnologías nunca fueron mis mejores aliadas.Ahora lo acepto y me enorgullezco del valor que tuve, de la valentía frente a tanta incertidumbre y tanta cobardía del exterior (yparaquébuscarcarasyculpables). Ahora sé que debo seguir y darme las gracias por descubrirlo. Por eso estoy comenzando de nuevo. No... Por eso estoy re.comenzando. Porque ahora he encontrado una manera de encaminar ésa impaciencia que no es más que exigencia hacia algo/alguien que no es: cuento mis dedos y sé que me calma, porque sé que
Y bueno... como estoy de limpieza emocional y voy uno por uno, una por una, todas ésas cajitas que aún no han sido colocadas o que no debieran estar en ése sitio... sino en otro, quizás de otra forma, o en otro color; me siento como un mar removido que por momentos tiene corrientes de agua un poco más tibia o de un frío como en los agujeros del océano... Con todo este trabajo, y el trabajo físico que ya volvió... con todo lo dificil y con todas ésas dificultades resueltas, con convicción y con fé, voy hacia delante... y tengo calma. Y sé que nada más con ésa calma que siento cuando me voy a dormir, nada más que ésa sensación de paz continua después de reflexionar o meditar, de hacer las cosas bien, de estar tranquila, de quererme como a nadie y como a nada, siento que todo esto merece la pena.
Hola, soy yo, yo conmigo misma, teniendo 23 años físicos y muchas historias que contarme.
Y qué bien...!!!!!!!!
Bendita seas*
No hay comentarios:
Publicar un comentario